Porque sí – Primer capítulo
Prólogo Estaba harto de esa situación. Me frustraba y sabía que aquello me acabaría explotando; yo explotaría. No podía creer que eso tuviese que pasarme a mí, pero lo que…
Prólogo Estaba harto de esa situación. Me frustraba y sabía que aquello me acabaría explotando; yo explotaría. No podía creer que eso tuviese que pasarme a mí, pero lo que…
Cada semana, en Cartelera de Libros, les ofreceremos las novedades más recientes de Letrame Grupo Editorial. Los labios tienen memoria de la mano de María José Rodríguez, El delirio…
Abro los ojos reaccionando instintivamente a la luz que se filtra por la ventana. Oigo la cálida voz de mi madre diciendo algo que ni siquiera logro apreciar, todavía estoy dormida. ―¡Ay, Dios! Mamá, ¿qué hora es? ―digo notando un agudo dolor de cabeza. ―Cielo, llegaste tarde anoche y bastante más bebida de lo que me hubiese gustado. Son algo más de las doce del mediodía. ―Aisss... ―susurro desperezándome―. Lo siento, mamá, sé que no debería beber, pero te aseguro que no es algo habitual. Solo... no sé, ayer lo necesitaba. Me incorporo perezosamente, con una clara mueca de arrepentimiento. Dios, creo que nunca me ha dolido tanto la cabeza. ―Lo sé, mi niña. Necesitabas desmelenarte un poco, ¿no? - Asiento un poco avergonzada, no sé muy bien en qué estado llegué anoche, pero seguro que no es agradable para ninguna madre ver así a su hija. ―Te entiendo, cariño, es solo que me preocupo por ti. ―Lo sé, mamá, gracias ―respondo haciendo un mohín. No me siento cómoda sabiendo que mi madre me vio en un estado tan poco apropiado. Mi madre recoge mi vestido de ayer y sale por la puerta de mi dormitorio. ―¡Tienes el desayuno listo! ―anuncia mamá desde el pasillo. No puedo tener más suerte con la familia que me ha tocado. Mi padre, Jorge Torres, es un amor, un hombre cariñoso y comprensivo. Para él su familia lo es todo. De hecho, la razón por la que un día creyese en el amor fue por mis padres y por el amor mutuo que aún después de tantos años se tenían. Por desgracia, después de mi amarga experiencia, pienso que el amor no es para todo el mundo. Mi madre, Caroline Becker, siempre me ha apoyado en todo y en estos momentos lo hace todavía más. Y mi hermano... ¿qué puedo decir de mi hermano? Pues que le echo muchísimo de menos. (más…)
Aquí os dejamos algunas de las reseñas de En sus manos: Mil libros y un té. Perdida en mis libros. Locas del romance. Paraíso de los libros perdidos. Si todavía…
Las ventajas de publicar con una editorial de autoedición son muchas, aunque se ha de analizar con precisión la editorial por la que vamos a optar. Cuando pensé en que…